Hace más de treinta años Fresia Castro inició una aventura espiritual que culminó en los contrafuertes cordilleranos del desierto de Atacama, en Chile, donde vivió durante quince años. Creó el Método Cyclopea de Activación Interna de la Glándula Pineal y comenzó a difundirlo a principios de la década de los noventa, expandiéndose por América y Europa. Este método es una herramienta vanguardista que une ciencia y espíritu para permitir al ser humano ir más allá del 10% de la capacidad cerebral que utiliza. El objetivo de este nuevo libro, publicado por Editorial Catalonia, es mostrar el proceso del ser para logran la realización que ha buscado, pero aún no recuerda. Este es un incentivo a que extraiga de sus propias memorias su identidad primera y recupere sus potencias dormidas en este viaje secuencial por cinco de las esferas infinitas, aquellas que están más cerca de nuestras posibilidades.
“Si dejamos de buscar afuera lo que está dentro y nos abocamos a nuestra real tarea, podemos intervenir y crear nuevos resultados”
– Fresia, este libro invita a un viaje multidimensional y profundo hacia el autoconocimiento. ¿Qué te inspiró a escribirlo y cuál crees que es su mensaje principal?
Mi labor como periodista, investigadora en el área científica, algo escéptica, pero a la vez con experiencias personales difíciles de comprender bajo las leyes de este campo limitado que habitamos, y el querer llegar al fondo de ciertos sucesos, me llevó a vivir lo extraordinario, sellando para siempre en mi experiencia un enlace ciencia espíritu.
Así es como todos los otros siete libros que he escrito han tenido objetivos similares, cada uno apuntando a distintos aspectos de la existencia humana, quise integrar en esta obra los propósitos de los anteriores en un amplio contenido que englobara aspectos eternos de la existencia del ser, de una manera lo más simple posible dentro de la profundidad temática.
Mi propósito es entregar al lector la posibilidad de reconocerse en estas esferas holográficas y encontrar en esta aventura las respuestas que busca y como acceder a su libertad creadora en los principales caminos de su propia historia.
-Hablas de un proceso de “recuperación de memorias” y de conexión con la luz interna. ¿Podrías explicarnos cómo este proceso se refleja en el contenido del libro? ¿Cuál es el papel de las “esferas infinitas” en esta búsqueda?
Nuestra identidad real no está en nuestro vehículo físico ni en el rol que aquí en este teatro de la vida jugamos transitoriamente. Somos seres-energía creadores, modelos únicos e irrepetibles, “a escala”, emanados e individualizados de un arquetipo UNO, creador perfecto; somos atemporales, inmortales, infinitos, densificados a la materia, que es el estado más denso del campo atómico, limitados a un mínimo de nuestro potencial, pese a nuestra herencia de perfección. Es en este estado donde realizamos nuestras creaciones, que son nuestras acciones manifestadas en resultados, que hacen de este mundo como lo conocemos en nuestra sociedad planetaria.
En este viaje interno y mágico, estas esferas van entregando, en un recorrido inesperado, esta información junto a las claves que pueden ponerse en práctica para descubrir esa identidad. Es un diálogo entre los personajes del libro y el lector, quien primero aparece como observador de su transitar en estas aventuras por estas esferas, para luego incorporarse como protagonista y asumir su responsabilidad creadora, siguiendo los acontecimientos secretos e imprevistos que su recorrido le va entregando. Es instruido desde una introspección que lo enfrenta a sus errores y aciertos de la vida, de manera casi didáctica, hasta incorporarlo a su rol de protagonista del teatro de la vida y su propia obra, mediante revelaciones que lo llevan a sentir ese feliz auto compromiso, como actor de su propia existencia.
En este caso son cinco de esas esferas, las más cercanas a nuestra vida, aquellas que se refieren a la felicidad, al amor, a la opulencia, al control de nuestra estructura física y por sobre todo al término del cambio llamado muerte.
-En el libro mencionas que los lectores deben buscar su “identidad primera”. ¿Qué significa esta idea de la “identidad primera” y cómo pueden los lectores comenzar a descubrirla?
Nadie busca lo que no conoce. Buscamos la perfección en todo, en la pareja, en el trabajo, en la salud, en nuestros proyectos, sabiendo que aquí no existe, pues todo es transitorio, todo tiene un comienzo, auge y decadencia.
Y cuando no la alcanzamos, duele, nos desilusionamos. ¿A qué se debe esta incesante búsqueda? A que esa perfección la hemos conocido y la hemos perdido. ¿Cuándo busca uno algo? Cuando lo ha extraviado. Como sucede con la pérdida del celular, o de las llaves, las buscamos porque antes nos pertenecía. Para ello, ante todo es necesario conocerse a sí mismo en su origen, es el camino correcto para descubrirse y encontrar el camino hacia esa perfección perdida.
Hay dos formas de conocerse a sí mismo, una es la que trasunta en el aspecto sicológico y su relación consigo mismo en cuanto a sus reacciones con sus experiencias en este mundo y sus influencias. Y existe otra que tiene que ver con el origen del ser, antes de experienciar este universo material, que es a la que me refiero en el libro. Nuestro ADN posee dos memorias, la memoria humanidad que contiene las experiencias y herencia genética de todo lo que comprende este mundo físico, y está la memoria del origen que constituye el 90 por ciento de nuestros códigos, por mucho tiempo llamado memoria basura porque no es descifrada en este campo. Esta última tiene una alta frecuencia que no pertenece a las de este encierro dimensional, limitado a un más y un menos.
Este es el motivo por el cual sólo puede activarse cuando el ser alcanza esa frecuencia, y esto es posible. En un potencial mayor al campo atómico, está el campo electrónico, donde los polos no están separados y al que pertenece en parte esa memoria. Digo en parte, porque viene del origen (no como principio o comienzo, sino como identidad) aún desconocido. Comienza el camino del descubrimiento cuando, luego de reconocer quien es, aprende a ser feliz, para conocer el amor y así, seguir con sus demás búsquedas hasta que en su propia comprensión pueda manifestarla y así, junto con ayudarse a sí mismo pueda ayudar a su entorno.
–En tu libro, parece hay una invitación a ir más allá de lo impuesto por el sistema. ¿Cómo visualizas la relación entre la espiritualidad personal y el sistema dominante que mencionas al inicio? ¿Qué papel juega la conciencia en este contexto?
Nuestro sistema dominante en la actualidad es frío, cruel y egoísta, generador de miedos. Todo ello producto de creaciones y acciones que desde hace milenios han sido impuestas y han ido tomando fuerza hasta producir los resultados que hoy vemos en nuestra sociedad. Al acatarlas, como creadores de nuestra realidad, le hemos dado el poder y hemos ido construyendo nuestros propias dificultados que hoy lamentamos. Entre ellas la separación y la confrontación permanente. Así como se han construido estos resultados, así también podremos cambiarlos. En lugar de buscar lo que nos une, hemos dado poder a lo que nos desune. Si dejamos de buscar afuera lo que está dentro, en nosotros, y nos abocamos a nuestra real tarea, podemos intervenir y crear nuevos resultados. Somos capaces de crear mundos.
Todos los seres forman parte de un colectivo. Si un ser se enciende a ese potencial mayor es capaz de influir en el entorno benéficamente y contagiar aquello que entra en su esfera de acción, porque todos, sin importar separaciones, buscan lo mismo y son sensibles a esa perfección llamada AMOR.
–A lo largo de tu vida, ¿cuáles han sido tus propias búsquedas o descubrimientos que te llevaron a escribir sobre estos temas?
Como te señalé al principio, hace ya más de cuarenta años que tuve experiencias tan extraordinarias que revolucionaron mi manera de pensar y actuar. Luego de pasar unos años en Francia, y luego de vivir más de 10 años en el desierto de Atacama, a través de prácticas internas e intensas de lo aprendido en esas instancias que dieron como resultados un nuevo comienzo, pude darme cuenta que lo que se llama “milagro” no es otra cosa que la aplicación correcta de leyes universales, que son las que mueven el universo en armonía y expansión. Comprendí que el concepto de Dios no se explica, es experiencia. Cuando viví en lo cotidiano esas trascendentales experiencias, supe lo que es esa libertad y poder de realización que tenemos, y lo que podía hacer en mi vida y mi entorno. Decidí entonces crear la fórmula que permitiera a muchos tener estas mismas experiencias transformadoras que consideraba era un privilegio que no podía dejarlo sólo para mí.
La fórmula es muy simple, siempre ha existido aunque desconocida para gran parte de la humanidad. Es recuperar nuestro vínculo con la Fuente generadora de VIDA que es la fuerza vital que mueve el universo. Es la unión ciencia espíritu que nunca debió separarse…. Un equipo electrónico como es el nuestro, debe romper la barrera de frecuencia por un acto de creación y conectar con su Fuente de Poder superior, que mora fuera de esta caja atómica, en el campo electrónico y producir así el proceso co-creador: Fuente – equipo. Así fue como nació el Método Cyclopea que ya tiene más de 35 años en expansión por el mundo a través de decenas de instructores acreditados. Los libros El Cielo está abierto, y Nuestro origen más allá del cielo, se refieren a esta fórmula con detalle.
Mi libro Surameris y el Cofre de los secretos, relata todo mi proceso y experiencias sorprendentes vividas durante esos años.
–¿Cuál es el principal cambio que esperas que los lectores experimenten después de leer este libro? ¿Qué mensaje esperas que se lleven consigo?
Que definitivamente sepan quienes son en realidad, son seres poderosos, intrínsecamente AMOR, que recuperen su libertad y poder co creador para instaurar no sólo su propio universo en mayor perfección, sino también apoyar a un cambio planetario armónico y soñado.
–¿Cómo ves el papel del libro en el contexto de los desafíos actuales de nuestra sociedad? ¿Crees que el autoconocimiento y la expansión de la conciencia son más necesarios que nunca en estos tiempos?
Por supuesto. Hoy vemos como el planeta está elevando su frecuencia y con ello está ocurriendo ya un despertar de conciencia. Sin embargo, es necesario que este despertar traiga consigo la responsabilidad de crear conscientemente el mundo que queremos y si bien eso parece imposible dado la forma en que suceden los acontecimientos, de acuerdo a lo que postulo en este libro, es totalmente posible lograrlo. Hay que buscar dentro del ser, no fuera de él como generalmente lo hacemos. Buscamos las respuestas y las soluciones en lo que este mundo nos puede entregar cuando aquí solo hay resultados de todas las creaciones, decisiones y acciones tomadas por la humanidad a través del tiempo. Cuando esto se comprende por experiencia, sabemos que podemos cambiar aquellos resultados que nos perjudican.
-¿Qué importancia tiene la conexión con la memoria ancestral o cósmica en el contenido del libro? ¿Crees que cada lector puede tener una experiencia diferente al respecto?
El camino por las distintas esferas va entregando al lector, ante todo, la posibilidad de recuperar esa conexión y luego, una preparación en cada una de ellas para que cada cual enfrente sus inquietudes y vivencias cotidianas desde su propia experiencia y comprensión. Habrá quienes, esta lectura podrá cambiar cuánticamente sus vidas y otros sólo lo leerán como un libro más, a lo mejor entretenido, o bien pueden no sintonizar con su contenido. En todo caso, aquí hay una proposición clara al lector, una ruta ascendente que cuando llegue al final del libro deberá tomar una decisión y espero sea la mejor.